Por qué los Feroz son mis premios favoritos

     Un año más los Premios Feroz vuelven a ser la envidia del resto de premios cinematográficos españoles (al menos de los tres principales): por la cantidad y calidad de sus invitados; por la combinación de galardones televisivos y de cine, consiguiendo que la gala se abarrote de rostros conocidos que trabajan, de verdad, en el audiovisual español y sin tener que tirar de invitados de relleno (llámesen triunfitos, presentadores o famosetes de la tele); por el gran número de nominaciones y categorías, (aunque bien es cierto que yo cambiaría las de cartel y trailer por cortometrajes)... Y sobre todo porque (casi) siempre estoy de acuerdo con el veredicto de los informadores cinematográficos que votan en los Feroz. Porque creo que en estos premios, al contrario que en los Goya, se premia la calidad sin tener en cuenta otro tipo de intereses (o al menos eso parece).

     Si todo esto lo apañas con una gala divertida, no demasiado larga, donde las buenas maneras y el postureo se dejan a un lado para dejar paso a la improvisación, la naturalidad y las múltiples botellas de vino que se van bebiendo los invitados a la gala... Consigues que los Premios Feroz sean los premios más esperados por todos los que amamos el cine español. Además este año la organización tuvo el acierto de abrirlo al público en general y de emitirlo en abierto por Youtube, dos decisiones que no hacen más que romper con ese hermetismo y formalidad impostada del resto de premios. Sin embargo, a pesar de que sean los mejores premios, todavía no tienen demasiada repercusión mediática y casi toda queda relegada a su hermano mayor los Goya... Una pena que además tampoco se emitan por ninguna televisión en abierto, por lo que desgraciadamente siguen siendo muy poco conocidos (haced una encuesta a vuestros conocidos y familiares a ver cúantos los conocen...).
   
     Aun así, ¡Vivan los Premios Feroz! Viva su espontaneidad, vivan sus flechas envenenadas a diestro y siniestro, vivan sus presentadores (este año una nerviosa Ingrid García-Jonsson) y vivan sus discursos pasados de vino.(Por cierto, 12/19 aciertos en la quiniela... 6,3 de nota. Necesito mejorar la puntería).

¡Y viva la presidenta María Guerra! (foto de bekia.es)