Tsunami de azúcar: Lo imposible.

     Porque no solo de Goyas vive el cine español. Pero catorce nominaciones son muchas nominaciones, y aunque dos películas la superan, "Lo imposible" (J.A.Bayona, 2012) ha batido el récord de edulcorante en una sola película de toda la Historia del Cine Español.
     Más de cinco millones de espectadores en España la avalan. La película "española" más taquillera de la historia ha triunfado en los corazones de los españoles, (muy admiradores de los pastelones norteamericanos que tanto triunfan). En el mio no.
    De una factura técnica impecable, unos efectos especiales absolutamente impresionantes y planos que ponen los pelos de punta, "Lo imposible" peca de un guión hecho a la medida de los espectadores más lacrimógenos, con un guión postizo, predecible y artificial al más puro estilo yanqui que aniquila cualquier atisbo de verosimilitud. Los típicos niños monos a los que solo les falta jugar al béisbol con su padre mientras su madre prepara las mazorcas de maíz para la cena no hacen más que arruinar aún más un guión increíble. Increíble porque no te lo crees.

Impresionante fotograma que muestra el desastre causado por el tsunami.

    A pesar de todo, logra su objetivo de angustiar al espectador y hacerle pasar un mal rato, principal objetivo de la cinta. Al menos Marta Etura supone el único y resplandeciente rayo de luz español en el último trabajo de un director al que le ha pasado como a Amenábar o Cortés: ya está más allá que acá.